1. Desmontaje y Evaluación: El motor se desmonta por completo para evaluar el estado de cada componente. Se inspeccionan pistones, bielas, cigüeñal, árbol de levas, culatas y otros elementos importantes para identificar desgastes, daños o fallas.
2. Limpieza Profunda: Se realiza una limpieza minuciosa de todas las piezas para eliminar cualquier residuo de aceite, suciedad o partículas metálicas que puedan haberse acumulado.
3. Reemplazo de Componentes Desgastados: Las piezas que muestran desgaste excesivo o daños irreparables se reemplazan con componentes nuevos o reconstruidos de alta calidad. Esto puede incluir anillos de pistón, cojinetes, sellos y juntas.
4. Rectificación y Ajuste: Si es necesario, se realizan rectificaciones en el cigüeñal, los cilindros y otras superficies para restaurar las tolerancias adecuadas. Se ajustan las válvulas y se calibra el sistema de inyección de combustible.
5. Ensamblaje Preciso: Se ensamblan todas las piezas cuidadosamente, siguiendo las especificaciones del fabricante y utilizando herramientas y técnicas adecuadas para garantizar un ajuste perfecto y una operación sin problemas.
6. Pruebas y Ajustes Finales: Una vez ensamblado, el motor se somete a pruebas rigurosas para verificar su rendimiento, presión de compresión, consumo de aceite y cualquier otra métrica relevante. Se realizan ajustes finales según sea necesario para optimizar su funcionamiento.
7. Mantenimiento Preventivo: Se proporcionan recomendaciones al cliente para el mantenimiento regular del motor, incluida la frecuencia de cambio de aceite, filtros y otros componentes, así como pautas para monitorear su rendimiento y detectar cualquier problema potencial en etapas tempranas.